Por acá en Barcelona el invierno se aproxima, este otoño ha sido bastante frío así que una sopa caliente sienta muy bien.  Para los que no son muy amigos de la coliflor, les recomiendo que prueben esta sopa, ya que apacigua bastante el sabor fuerte de esta para transformarla en una crema suave y deliciosa.

No había posteado hace tiempo una receta por motivo de mi embarazo que no me dejaba entrar a la cocina, ni soportaba olores, de a poco los mal estares se están pasando y estoy pudiendo volver a la cocina   y comer algo más que jalea, apio, limón y manzana verde….

Partamos de a poco con una sopita…

INGREDIENTES (para 4 personas)

PREPARACIÓN

• Separar las flores de la coliflor y ponerlas en una olla.
• Agregar la leche,  luego agregar agua hasta tapar la coliflor, todo esto en frío.
• A  3/4 de cocción de la coliflor, cuando todavía esta dura pero ya empieza a ablandarse, condimentar con sal, pimienta y nuez moscada.
• Dejar cocinar hasta que la coliflor esté blanda.
• Apagar el fuego, colar la coliflor y reservar el líquido de cocción.
• Volver a poner la coliflor en la olla, agregar un poco de la leche en que se cocinó y empieza a molerlo con una miniprimer o si prefieres directamente en la licuadora (juguera), agrega el líquido en medida del espesor que le quieras dar, agrégala de a poco.
• La decoré con semillas de sésamo negro, pero también podría haber sido ciboullette, unos crutones o simplemente nada porque realmente está muy buena…